El deseo sexual excesivo en animales (o satiriasis en animales) puede conducir a problemas de salud mental en perros. Sin embargo, este trastorno presenta ciertos síntomas y puede ser tratado, lo que nos ahorrará de situaciones incómodas en la calle.
La Satiriasis en animales se caracteriza por un exceso de apetito sexual que puede perjudicar el comportamiento y la salud del animal. Aunque es más frecuente en los machos, las hembras también pueden ser afectadas, pero en una escala menor.
Madurez sexual en perros
Durante las primeras semanas de vida, los cachorros no tienen idea de los límites de su propio cuerpo. Por lo tanto, no se distinguen de su madre o hermanos. Esta percepción cambia en el destete, cuando cada perro comienza a reconocerse como un ser independiente en el cotidiano de su manada.
Pero, en este momento, aún no logran diferenciar los sexos. Esta es la razón por la cual los machos y hembras se comportan de forma asexual. Es en la llegada de la pubertad y del primer celo de la hembra que los sexos empiezan a distinguirse. Los cachorros pasan a reconocerse como seres sexualmente activos.
Entonces, al igual que sucede con las personas, es muy común que los perros desarrollen ciertos impulsos de autodescubrimiento y autosensibilidad durante su “adolescencia”.
Los machos y las hembras “adolescentes” generalmente crean hábitos para explorar el propio cuerpo y tener placer. Tales hábitos implican lamer y sentarse encima de sus órganos genitales. Tal vez estos comportamientos puedan causar momentos incómodos a los humanos tutores, en especial cuando se despachan a hacerlos delante de otras personas, pero son totalmente normales para los perros.
El problema es cuando el apetito sexual se vuelve excesivo. Esta conducta lleva al perro a desarrollar comportamientos que ponen en riesgo su salud o el bienestar de la casa. ¿Cómo reconocer la Satiriasis en perros?
Síntomas de la Satiriasis en animales
Algunos comportamientos son naturales en perros sanos, sexualmente activos y no castrados. Ejemplos son el marcado del territorio y los intentos de huir de casa. Sin embargo, la situación se vuelve más compleja cuando el perro no puede satisfacer sus deseos sexuales y necesidades fisiológicas. Esto puede suceder con mucha frecuencia si no vive con hembras receptivas.
Como consecuencia, el perro generalmente sufre de una acumulación de tensión. Esto se refleja en su comportamiento y salud.
Los machos normalmente tratan de satisfacer su apetito sexual con sus juguetes, con nuestras piernas (o la de visitas de la casa!), con las mangas de nuestros abrigos, con otros machos y con varios otros objetos de nuestra casa. Además, pueden ser más agresivos, inquietos y huir con más frecuencia.
Vagar por las calles es un riesgo para la salud de nuestros animales domésticos. En ese ambiente, quedan expuestos a innumerables microorganismos, parásitos, enfermedades y accidentes. Además, su presencia contribuye al aumento de la población de los perros callejeros. Por lo tanto, la satiriasis también puede considerarse un problema de fauna urbana y un problema social.
En las hembras, la satiriasis es más rara, pero puede llevar a varios trastornos orgánicos, como quistes en los ovarios. Y, al igual que los machos, las hembras pueden desarrollar comportamientos sexuales casi obsesivos, como quedarse caminando haciendo presión o lamiendo la vulva.
Al observar cualquier cambio en el comportamiento de su mascota, como siempre recomendamos, que es esencial ir rápidamente al veterinario.
Esterilización: ¿un posible tratamiento para la Satiriasis en animales?
Para tratar la Satiriasis en animales, debemos adoptar ciertas medidas para controlar sus apetitos sexuales. También es importante evitar que el animal huya y coloque su propia salud y vida en riesgo.
La castración (o esterilización) es una cirugía de corta duración y bajo anestesia general. Su propósito es quitar los órganos sexuales de machos y hembras. Los testículos se retiran de los machos, mientras que los ovarios y el útero se quitan de las hembras.
La retirada de órganos sexuales no implica la eliminación del deseo sexual. Sin embargo, la mayoría de los perros adopta un carácter más tranquilo y reduce su apetito sexual después del procedimiento. Los mayores efectos de reducción ocurren en machos que se castran antes de tener algún contacto sexual con una hembra.
Consejos para calmar el apetito sexual de tu perro
Tenga en cuenta que enojarse o dar castigos a nuestras mascotas no ayudará a resolver el problema. Es esencial entender que todos los comportamientos pueden ser equilibrados o “adecuados” con la educación correcta.
Al observar a su perro montando un objeto u otro animal, es importante no reír, gritar, reprender o actuar de forma agresiva. La violencia es contraproducente en la educación de todas las especies. De esta forma, una conducta violenta puede ser muy peligrosa cuando se trata de perros de gran tamaño.
Para actuar correctamente en esta situación, usted debe decir “no” en un tono firme y tranquilo. También se recomienda agarrarlo por el collar y llevarlo a un rincón aislado de la convivencia familiar por la correa. Lógicamente, no debemos dejar al perro al aire libre durante mal tiempo, bajo la lluvia o en un ambiente con poca higiene.
Atar al perro puede ser un acto simbólico. Esta acción sirve para mostrar que su actitud no corresponde a las normas de la casa. Sin embargo, no es para dejarlo allí por horas, sino poco tiempo hasta que se calme y entienda que su actitud no ha sido bien recibida en su “manada” y logre asimilarlo.